Ensayo sobre la composición musical

miércoles, 10 de septiembre de 2008

[Una respuesta para Sue]

Cierto día se me encomendó la tarea de agregar teclados a canciones que ya tenían todo lo demás. Pensé entonces que no debía crear nada por mi propia cuenta, sino poner atención y esforzarme por escuchar las melodías que ocupaban esos espacios vacíos en aparente silencio. Eventualmente, llegué al punto en que parecía descubrir notas que siempre habían estado ahí. Cuando la canción estuvo completa sentí que yo había tocado esas partes que faltaban, pero no había creado nada, porque sólo fui un mediador entre la música que ya existía y la que todavía no había sido descubierta... si es que eso es físicamente posible.

Algunos meses después, tuve un potente déjà vu mientras leía una entrevista de maudlin of the Well: Toby Driver hablaba de una fuerza creativa tácita y omnipresente que habla a través del artista automáticamente, quien sólo traduce ese mensaje según su capacidad. En pocas palabras, el artista comunica el arte y no lo crea.

Luego descubrí que en las notas de sus dos últimos discos, Driver decía que la banda trató de encontrar música en lugar de componerla, esto a través de proyección astral y sueños lúcidos que aparentemente les permitía traer música pre-existente de vuelta desde el plano astral.

Ellos citaban a Yusef Lattef, quien propone una idea similar: la voz interior del músico que se manifiesta durante la improvisación y la ejecución. Él ha escrito sobre música que proviene de nuestro interior físico, mental y espiritual, a la que llama "música autofisiopsíquica".

Parecería que esto ya se volvió demasiado esotérico, pero lo necesitaba para finalmente preguntar: ¿cómo y cuándo nace una melodía y cómo decide un compositor de qué forma la desarrollará y por qué rumbos la conducirá mientras la canción dure?

Todas las respuestas son subjetivas. Se dice que Devin Townsend dejó de tomar el medicamento para su desorden bipolar cuando compuso su álbum Alien; que The Dillinger Escape Plan escogía sus tiempos tirando los dados; y Aphex Twin (quien es por cierto el mesías de la electrónica) todavía se da el lujo de afirmar que creó un programa con procesos algorítmicos que generan automáticamente tiempos y melodías. Esto, sin mencionar a Lennon/McCartney o peor aún, a Björk o a Mike Patton, entre muchos otros más.

Entonces, ¿qué se puede pensar de la canción de Green Carnation que dura 60 minutos, de la banda sonora que Ulver hizo del libro de William Blake, o del disco de hip hop-progresivo de Gavin Castleton que narra la historia de su vida al revés (desde el 2054 hasta el presente)?

Nada, porque al final, sólo existen aproximaciones de la verdad. Por eso hay que disfrutar el arte, no interpretarlo.

Retroceda esa canción de Radiohead por favor, quiero oírla otra vez.

Sueño de una tarde de verano

martes, 9 de septiembre de 2008


Un foto-cuento (o el prólogo de otro y lo que sucede antes de una epifanía). Véanlo en HQ


Sleep? ain't sleepin'... Sleep's for dreamers!



Bob Dylan - I'm Not There


La traducción del texto:

In order to dream, we must wake up first - Chinese proverb

Il était une fois...

...a lonely soul called Aurora,
who dreamed without closing her eyes,
she had amazing possibilities of abstraction
(some days seemed to her in another colour)

She saw what no one else saw
but she didn't have what everyone else had: a voice.
The only one she could hear was inside her head
...a little voice she translated to be her conscience

Sometimes, under a porcelain sky
she read between clouds to interpret them,
or went out floating barefoot at dawn
without fear that a cold would make her sick

[Because imagination is to her as the moon is to the sea]
and her memories are the postcards
she has collected since she was a little girl

Inside her, the voice said:
Why so much introspection, Aurora?
If there's so much to dream about outside?

Start taking polaroids with your memory:
of every tonality, every texture and every shape,
because time always leaves in a train to the west
that makes our memories dissolve forever

And do not worry
if too many questions explode in your head,
for reality works with certain mechanisms
(which are not impossible, just different)

Focus your imagination towards the outside
where you don't float nor travel in carousels,
but you feel the soft claustrophobia of being alive
and the naive pleasure you sometimes get when you cry

Then wake up, Aurora!

Every contradictory detail,
every image you have created,
were not the remains of a fire
but you... scattered all around

Aurora stopped for a while
before coming out to the surface

Thus, her outer voice ignited and said:
"No more silence, for I am awake
...I guess"

And that was how the story of Aurora then started:

The beginning

"A Midsummer Afternoon's Dream"

Tony Sandoval

lunes, 8 de septiembre de 2008

Una melodía vale más que mil palabras

domingo, 7 de septiembre de 2008

Lecciones de vuelo con Mathias Rust es una canción instrumental que dice demasiado. Aparte de la emotividad, la ejecución sincera, el desarrollo espontáneo de los riffs y todo lo demás que tiene que ver con la música, el título toma un significado nuevo y perfecto después de leer un poco sobre este intrépido personaje.

Abel Hernández lo explica así:
"Es algo muy inconsciente. No sé cómo se coló Rust allí. Nos apetecía acabar el disco con esta canción en 4 partes y nos parecía que tenía alguna variación de intensidades de vuelo, de la subida y el vuelo entre las nubes al planeo raso y los picados. Supongo que nos parecía interesante la idea de verlo como las lecciones de vuelo que habíamos recibido (fue una de las primeras canciones que salió en nueva fase de Migala) y que después nos lo pareció aún más que este tema se oyera y viera como eso, como si fuera Mathias Rust quién nos las diera (un toca narices que usó el humor para enfrentarse con su momento histórico y alguien que demostró que se podía ser joven sin ser un pringao y que convirtió su irresponsabilidad juvenil en algo muy interesante con lo que ayudó a desbaratar todo un orden mundial intocable pero de cartón piedra, un orden creado y alimentado por el miedo a lo otro)".

...post-rock tenía que ser.

Smoke

sábado, 6 de septiembre de 2008


Esto es genial.

Lo retrocedía a cada rato porque tiene varios movimientos y tomas que lo ameritan demasiado. Ahora siento una gran necesidad de compartirlo con más de una persona, así que ahí les va.

[3:55]

La música más bella del mundo

jueves, 4 de septiembre de 2008

Se piensa que la música clásica está impregnada de la genialidad musical más grande que la mente humana jamás haya contenido. Por otro lado, se podría afirmar que el black metal contiene más odio y misantropía que cualquier tipo de música que el hombre haya creado. Y luego, está el post-rock: música inspirada en la belleza misma, que hace que cualquier oyente atento haga lo que todos deberíamos de hacer más seguido: sentir, nada más.

Esta introducción debería de ser innecesaria para un género que ha existido desde hace más de una década pero, como muchos otros, es desconocido por no ser radial en lo absoluto. Aunque hay diferentes versiones, muchos críticos comenzaron a usar el término a principios de los 90 para describir a bandas instrumentales influenciadas por la música ambiental, el jazz y el krautrock.

En resumen, el post-rock es música minimalista tocada con los instrumentos tradicionales del rock: guitarra, bajo y batería. Una típica canción de post-rock parece basarse en la misma fórmula, puesto que usualmente consiste en tres momentos: (1) el inicio que gradualmente aumenta su intensidad y explota en (2) un clímax sonoro que sacude al oyente hasta sus cimientos, soltándolo suavemente hasta que llega (3) el inevitable final que lo despierta poco a poco de ese estado mental tan indescriptible.

Las composiciones son usualmente largas, formadas por pocos temas repetitivos que se desarrollan sutilmente, pintando paisajes de sonido con la cambiante dinámica de los instrumentos. Además, como otros tipos de música que evocan emociones intensas, los álbumes dan mejores resultados cuando son escuchados de principio a fin, y no como canciones aisladas, algo que se puede hacer sin problema con otros géneros.

Casi todas las bandas de post-rock son instrumentales. Cuando hay voces, éstas se usan como un instrumento más para crear una textura adicional, como en el caso de Sigur Rós, la banda más popular de post-rock. Aunque su vocalista canta con falsettos (si se pregunta qué es un falsetto, escuche cualquier canción de Coldplay, espere a que Chris Martin cante las notas altas y se dará cuenta), él canta en un idioma inexistente que sólo imita sílabas del islandés, sin decir nada realmente. Así, las páginas de su disco ( ) están en blanco para que el oyente interprete las letras según le parezca.

Esto no quiere decir que las canciones de post-rock no transmitan ningún mensaje. Todo lo contrario. Uno de los ejemplos más afamados es Red Sparowes, una banda de Los Angeles completamente instrumental que, de alguna forma, narra en su último disco la historia de “El Gran Salto Hacia Adelante”, un programa del gobierno chino puesto en marcha entre 1958 y 1960 que intentaba transformar rápidamente la economía agraria dominada por los campesinos en una sociedad comunista moderna. Dicho plan fue un enorme fracaso que causó la muerte de aproximadamente 38 millones de personas a causa de la hambruna.

Godspeed You! Black Emperor es un pionero del género con un contenido altamente cargado de mensajes políticos, a pesar de no tener vocalista. Pero más que una banda instrumental, GY!BE suena a una orquesta sinfónica tocando música épica con todo el sentido de la palabra. Tal vez por eso sea una de las agrupaciones de post-rock más admiradas de la historia.

Por otro lado, un buen ejemplo de banda con vocales es Gregor Samsa, nombrada en honor al personaje de Franz Kafka. Esta agrupación estadounidense combina post-rock con slowcore, un tipo de rock muy lento y a menudo depresivo. El resultado es, indudablemente, el epítome de la fragilidad hecha música, algo totalmente recomendado para los oyentes de temperamento melancólico que se fijan en los pequeños detalles.

En fin, podría mencionar muchas otras bandas, pero la verdad es que al final, como en los demás géneros, hay demasiada música y muy poco tiempo. Así que, hágase a sí mismo un favor y explore un poco esta música tan querida por su reducido pero leal público. Después de todo, este es sólo otro recordatorio de que lo mejor no es necesariamente lo más popular. He ahí otra razón por la que nunca escucho la radio.

Wayfarer

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Un pequeño milagro que transcurrió en cámara lenta